Prepara crème brûlée, el tradicional postre francés que podrás degustar en México sin viajar a Francia

Comer postres es uno de los mayores placeres de la vida, a nadie le podría molestar finalizar una comida con una deliciosa degustación, y para tener un sinfín de opciones es necesario ampliar el panorama hacia el extranjero, es por eso que te diremos cómo puedes preparar la tradicional crème brûlée, desde la comodidad de tu casa.

¿Cuáles son los ingredientes necesarios para preparar crème brûlée?

• 500 ml de crema de leche (nata para montar)
• 1 vaina de vainilla (o 1 cucharadita de extracto de vainilla si no tienes la vaina)
• 5 yemas de huevo (esos amarillos que quedan cuando separas el huevo)
• 100 g de azúcar (más o menos media taza)
• Azúcar adicional para caramelizar (unas 4-6 cucharadas, o al gusto)

Cocinar | Te sentirás como todo un profesional siguiendo esta receta (Pexels).

¿Cómo se prepara la crème brûlée desde casa?

Comienza la receta precalentando el horno a 150°C (300°F), y ten a mano el extracto de vainilla.

En una cacerola mediana, vierte la crema de leche. Añade las semillas de vainilla y la vaina entera para infundir más sabor. Si usas extracto de vainilla, añádelo más tarde.

Calienta la crema a fuego medio hasta que veas burbujitas en los bordes, pero no dejes que hierva. Luego, retírala del fuego y déjala reposar un par de minutos.

En un bol grande, bate las yemas de huevo con el azúcar hasta que la mezcla esté suave y un poco pálida. Usa un batidor de mano o un tenedor, no necesitas nada sofisticado.

Esta parte puede parecer un poco técnica, pero es fácil. Vierte la crema caliente poco a poco sobre la mezcla de yemas, mientras bates constantemente. Esto evita que las yemas se cocinen de golpe. Si estás usando extracto de vainilla, añádelo ahora.

Usa un colador fino para verter la mezcla en otro bol. Esto elimina cualquier pedacito de huevo cocido y hace que tu crème brûlée quede suave como la seda.

Divide la mezcla entre ramequines o moldes pequeños para horno. Colócalos en una bandeja profunda para hornear.

Llena la bandeja con agua caliente hasta que llegue más o menos a la mitad de los moldes. Esto ayuda a que se cocinen de manera uniforme y no se formen burbujas en la crema.

Hornea durante unos 40-45 minutos. Sabrás que están listos cuando los bordes estén firmes pero el centro aún tiemble un poco, como un flan.

Saca los moldes del agua caliente con cuidado. Déjalos enfriar a temperatura ambiente primero y luego mételos en el refrigerador por al menos 2 horas, o mejor toda la noche si puedes esperar.

Antes de servir, espolvorea una capa fina y uniforme de azúcar sobre cada crème brûlée.

Usa un soplete de cocina para derretir y caramelizar el azúcar. Si no tienes soplete, puedes usar el grill del horno: pon los moldes lo más cerca posible del calor y vigílalos de cerca para que no se quemen.

Deja que el azúcar caramelizado se enfríe un minuto para que se ponga crujiente.

¡Rompe la costra con una cuchara y disfruta de la rica y cremosa delicia debajo!