Cuando encuentras un hongo en tu fruta, puede ser tentador simplemente cortar la parte afectada y comer el resto. Pero, ¿es realmente seguro hacerlo? Según los expertos, la respuesta es un rotundo no.
¿Por qué no es seguro comer el resto de la fruta?
Aunque la parte visible del hongo se elimine, el problema no se limita a esa área. El moho, también conocido como hongos filamentosos, tiene una red de hifas que se extienden por toda la fruta, incluso en las zonas que parecen estar sanas.
Al comer una fruta con hongos, incluso si has quitado la parte visible del hongo, te arriesgas a ingerir estas esporas.
Esto puede llevar a una serie de problemas de salud, desde molestias estomacales hasta reacciones alérgicas.
En casos extremos, algunos tipos de hongos pueden producir micotoxinas, que son sustancias tóxicas que pueden ser perjudiciales para la salud
Además, el hongo puede afectar la calidad y el sabor de la fruta. Una fruta con hongos puede tener una textura blanda y un sabor desagradable, incluso en las áreas que parecen no estar afectadas.
Si encuentras un hongo en tu fruta, la medida más segura es descartar toda la fruta. Aunque puede parecer un desperdicio, es mejor prevenir que lamentar cuando se trata de tu salud.
Recuerda, la mejor manera de evitar los hongos en tus frutas es almacenarlas correctamente y consumirlas dentro de su vida útil. Mantén tus frutas en un lugar fresco y seco, y siempre lávalas antes de comer.
Cabe mencionar, que esto no solo aplica para las frutas, sino para todos los alimentos, como las verduras, el pan de caja o incluso alguna botana. Ten en cuenta que las micotoxinas pueden estar presentes en toda la pieza, incluso en las áreas que parecen estar sanas.
