Los Polinesios han cautivado los corazones de Latinoamérica, y en esta ocasión Leslie lo hace sin sus hermanos, abriendo las puertas de su casa y preparando un delicioso menú para los comensales de Divina Comida, que los dejó con la boca abierta por la buena combinación de sabores que decidió cocinar.
Leslie Polinesia participa en Divina comida y cautiva los paladares de sus comensales
La hermana polinesia abrió las puertas de su casa para prepararle un delicioso menú a los comensales.
Leslie tiene las bases de la gastronomía mexicana, pero fue su gran experiencia recorriendo el mundo lo que la ayudó a dejar con la boca abierta a los espectadores, pues hizo una mezcla de sabores internacionales que quedaron para chuparse los dedos.
Mencionó que cocinar es una de sus pasiones, pero no lo hace tan a menudo debido a su falta de tiempo.
Como buena anfitriona, Leslie polinesia recibió a los invitados de Divina Comida con un menú que dejó claro su recorrido por el mundo, pues a cada platillo le dio un toque internacional.
Lo primero que preparó fue un cóctel, usándolo como la bebida de bienvenida, creado con lavanda, ginebra, Vermont y una cereza negra para darle el plus.
Comenzando con los platillos cocinó una entrada italiana, que tiene como base una ensalada de origen siciliano, preparada con lechuga, avellana, pistache, naranja y crutones.
Para el plato principal decidió cocinar un ‘Tsukiji del mar’, que está conformado por un salmón al estilo oriental que se baña en caramelo y es acompañado con una guarnición de berenjena.
Para cerrar con broche de oro, Leslie Polinesia despidió a sus invitados con un toque romántico, pues el platillo que sirvió es nombrado ‘beso francés’, se trata de un pastel de mil hojas.
Y no sólo la comida fue agradable, sino que Leslie Polinesia le dio su toque alegre y bromista a la velada, que dejó con una sonrisa a los comensales de Divina Comida.
