¿Qué pasa si seguido ando con la reserva de gasolina de mi coche?

Conducir con la reserva de gasolina puede parecer inofensivo, pero esta práctica común puede tener consecuencias negativas para tu vehículo a largo plazo. ¿Qué le puede pasar a mi coche? Te contaremos los riesgos asociados con el uso frecuente de la reserva de combustible y cómo puede afectar el rendimiento y la durabilidad de tu automóvil.

¿Qué pasa si manejo con la reserva de gasolina de mi carro?

De acuerdo con especialistas en automóviles, esta práctica es muy común, pues se tenía la creencia que esto haría ahorrar gasolina, sin embargo, señalan que es muy malo realizalo. Esto porque no solo daña el tanque de tu vehículo, sino que a la larga puedes provocar un daño severo a tu carro.

Estos son los riesgos de manejar con reserva de la gasolina:

1.- Contaminación del sistema de combustible. Los sedimentos acumulados en el fondo del tanque pueden llegar al sistema de combustible, causando obstrucciones y daños.

2.- Daño al convertidor catalítico. Partículas y sedimentos pueden dañar este componente crucial para el control de emisiones.

3.- Estrés en la bomba de combustible. Funcionar con bajo nivel de combustible puede sobrecalentar y desgastar la bomba prematuramente.

4.- Pérdida de potencia del motor. La acumulación de impurezas puede resultar en una pérdida notable de potencia y eficiencia.

Es recomendable evitar conducir con la reserva siempre que sea posible. Mantener el tanque al menos a un cuarto de su capacidad puede prevenir muchos de estos problemas y asegurar un funcionamiento óptimo del vehículo.

La reserva de gasolina no está diseñada para ser utilizada regularmente. Conducir frecuentemente en reserva no solo pone en riesgo componentes vitales del coche, sino que también puede llevar a costosas reparaciones.

Una buena práctica es recargar combustible antes de que el indicador llegue a la zona roja, protegiendo así la salud a largo plazo de tu vehículo.