¿Qué pasa si no amamanto a mi bebé? Esto dicen expertos
La leche materna es fundamental para el desarrollo del bebé, pero, ¿qué pasa si no lo amamanto? Chécate qué dicen los expertos.
Si eres mamá primeriza y aún no sabes si amamantar o no a tu bebé ¡no pasa nada! es normal que tengas dudas e inquietudes. Sin embargo, debes saber las consecuencias que esta decisión puede tener, según los expertos.
Los beneficios de la lactancia materna
La leche materna es el alimento ideal para los bebés recién nacidos y lactantes, ya que proporciona todos los nutrientes necesarios para su crecimiento y desarrollo. MedlinePlus nos da algunos de los beneficios de la lactancia materna incluyen:
- Fortalecimiento del sistema inmunológico: la leche materna contiene anticuerpos que ayudan a proteger al bebé de infecciones.
- Reducción del riesgo de enfermedades: los bebés amamantados tienen menor riesgo de sufrir enfermedades como diarrea, infecciones respiratorias, obesidad y diabetes tipo 2.
- Desarrollo cognitivo: la lactancia materna se asocia con un mejor desarrollo cognitivo en los niños.
- Vínculo emocional: la lactancia materna fortalece el vínculo emocional entre la madre y el bebé.
¿Qué pasa si no puedo o decido no amamantar?
Si por alguna razón no puedes o decides no amamantar a tu bebé, debes conocer qué es lo qué podría pasar.
La Unicef señala que cuanto más se retrasa la lactancia, mayor es el riesgo de que el bebé muera durante el primer mes de vida. Asimismo, indica que si se retrasa la lactancia materna de 2 a 23 horas después del nacimiento aumenta el riesgo de morir en los primeros 28 días de vida en un 40%.
Estas son las causas de un rechazo a la lactancia
Mayo Clinic señala que las causas comunes de un rechazo a la lactancia son:
- Dolor o molestia: si el infante presenta algún problema en los labios. Incluso una infección de oído puede causar dolor al succionar.
- Enfermedad: un resfriado o la congestión nasal pueden dificultar su respiración durante la lactancia.
- Estrés o distracción: el exceso de estimulación, el retraso en la alimentación o una separación prolongada de su madre pueden causar irritabilidad.
- Aromas inusuales: los cambios del olor de la madre, ya sea por un nuevo jabón, perfume o desodorante.
- Sabores diferentes: los cambios en el sabor de la leche materna, causados por lo que comes, un medicamento, la menstruación u otro embarazo.
- Reducción del suministro de leche: suplementar al bebé con fórmula podría reducir tu suministro de leche.
Ahora que sabes los riesgos de no amamantar a tu bebé, así como los beneficios que tiene, tú podrás tomar la decisión que sea más factible para ti y para tu bebé. En caso de que tengas algún inconveniente o duda, acude con el pediatra, él te guiará por el buen camino.