¡Cuidado! Esta golosina podría dañar tu mandíbula si la consumes en exceso

Comer dulces es uno de los mejores placeres de la vida, pues tiene buen sabor, es des estresante y además es divertido, pero como todo lo bueno, tiene su lado contrario, pues comer la golosina de la que te hablaremos, en exceso podría dañar los dientes y por lo tanto el bienestar familiar.

El dulce que podría causarte daños en la mandíbula

El chicle en exceso puede potencialmente causar daño a la mandíbula y a los músculos asociados, especialmente si se realiza de manera repetitiva y durante largos períodos de tiempo, el exceso de masticar chicle puede ser perjudicial para la mandíbula:

Masticar chicle de manera continua ejerce presión sobre los músculos de la mandíbula. Esto puede llevar a la fatiga muscular, dolor y tensión en la mandíbula y en los músculos circundantes.

La articulación temporomandibular (ATM) conecta la mandíbula con el cráneo y es responsable de los movimientos de la mandíbula, como la masticación y el habla. El exceso de masticar chicle puede causar desgaste excesivo en esta articulación, lo que puede resultar en dolor, clics o chasquidos al abrir o cerrar la boca, y en casos más graves, trastornos temporomandibulares (TMD).

Mascar chicle. | El chicle podría dañar tu mandíbula (Especial: Freepik).

Masticar chicle con frecuencia y durante períodos prolongados también puede aumentar el desgaste de los dientes, especialmente si el chicle contiene azúcares o ingredientes ácidos que pueden erosionar el esmalte dental con el tiempo.

El hábito excesivo de masticar chicle puede desencadenar trastornos de la masticación, como la hiperactividad de los músculos de la mandíbula, lo que puede dificultar la capacidad de la mandíbula para realizar movimientos de manera suave y eficiente.

Aquellas personas que ya sufren de trastornos temporomandibulares (TMD) u otras condiciones relacionadas con la mandíbula pueden experimentar un empeoramiento de sus síntomas con el exceso de masticación de chicle.

Masticar chicle en exceso puede tener efectos negativos en la mandíbula y en la salud bucal en general. Es importante moderar el consumo de chicle y prestar atención a cualquier signo de tensión o dolor en la mandíbula para evitar posibles problemas a largo plazo.

Si experimentas dolor persistente en la mandíbula u otros síntomas relacionados, es recomendable consultar a un dentista o médico para recibir un diagnóstico y tratamiento adecuados.