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¿Cómo afectan los microplásticos del chicle a tu salud?
Un estudio de la Sociedad Estadounidense de Química encontró que al mascar chicle se liberan microplásticos que van a nuestro organismo.25 de marzo, 2025 | 11:06 a.m.
Chicles y microplásticos. | Conoce si realmente existe una afectación de los microplásticos del chicle al cuerpo. (Especial: Freepik).
Después de comer, para estudiar o simplemente por mero gusto, solemos masticar un chicle, ya sea de menta, hierbabuena o de sabores frutales. Sin embargo, recientemente un estudio realizado por la Sociedad de Química en Estados Unidos encontró que este hábito tan normal puede liberar microplásticos, pero ¿estos realmente impactan en nuestro cuerpo? Entérate aquí.
Encuentran microplásticos en los chicles
Un estudio dirigido por Sanjay Mohanty, de la Sociedad Estadounidense de Química, encontró que al mascar chicle (natural o sintético), durante los primeros ocho minutos, se liberaban de 100 hasta 600 microplásticos, eso sí, si se consumía un gramo de esta golosina.
Y, aunque los ingredientes pueden dar indicios de la cantidad exacta de microplásticos o bien, saber de dónde provienen principalmente, la verdad es que en la mayoría de las etiquetas de este dulce no viene con claridad. Incluso, usan el término ‘goma base’ sin detallar bajo qué mezcla se conforma.
No obstante, pese a que está comprobado que los microplásticos ya están prácticamente en todas partes (el aire, la contaminación, el agua, utensilios de cocina y más), realmente no estamos exentos de tenerlos en nuestro organismo si masticamos chicle o no.
¿Realmente afectan los microplásticos de los chicles al organismo?
Si bien ya te dijimos que los microplásticos están en todas partes, la cosa es que, en términos generales, sí impactan de forma negativa. No obstante, todo va a depender del grado, tipo de exposición, ingreso de los mismos en nuestro organismo y estado de salud que presentemos, de acuerdo con Luis Francisco Sánchez, de la OPS.
De estar muy expuestos a estos residuos, podría impactar principalmente en el hígado y los tejidos del cerebro, influyendo en nuestra conducta y provocando trastornos neurológicos y neurodegenerativos, según expertos de la Universidad de Rhode Island, en Estados Unidos.
Específicamente con los chicles, los cuales se almacenan en nuestra saliva y pueden irse directamente al estómago, la verdad es que no hay prueba exacta de su impacto negativo. Y es que mucho de ello es porque no es un producto que se consuma diariamente y más de una vez al día, sino que se trata de una golosina que se disfruta esporádicamente y por un tiempo limitado.
Incluso si las personas comieran 180 chicles, ingerirían un aproximado de 30 mil microplásticos, siendo una “cantidad insignificante comparada con otras muchas ocasiones en que se pueden ingerir microplásticos”, de acuerdo con Sanjay Mohanty.
Entonces… ¿es un riesgo o no? Pues la verdad es que, como todo, en exceso es negativo, y siempre es mejor optar por otros productos más naturales.
En el caso del chicle, mascar una hoja de alguna hierba, cacao, semillas o cualquier otro alimento saludable puede ser la opción. Y como los microplásticos están en todos lados, lo mejor es tener una forma de vida lo más ecológica y natural posible.
