La Universidad Nacional Autónoma de México detalla que los traumas son aquellos que ‘amenazan el bienestar físico o emocional de un individuo’ y lamentablemente, el impacto es tan grande que ya forma parte (inconscientemente) de su estructura mental y de las emociones.
Pueden ser causados por alguna caída, accidente, violencia o algún sufrimiento emocional o físico; suceden de manera inesperada y con mucha intensidad lo cual, resulta amenazante para nosotros y ‘no tenemos control ni somos capaces de responder de manera eficaz’,así lo explicó el académico Hideko Tanamachi Tanaka.
Los síntomas pueden variar, pero comúnmente incluyen ansiedad severa, flashbacks y conductas de evitación y pueden afectar significativamente la vida cotidiana y las relaciones de una persona.
La verdad sobre heredar los traumas
El Hospital Monte Sinaí en Nueva York realizó un estudio donde pudieron comprobar que los traumas sí se pueden transmitir genéticamente.
Los investigadores tomaron la composición genética de un grupo de personas descendientes de algunas de las víctimas que sobrevivieron a los campos de concentración, la guerra y régimen nazi del Holocausto de 1941 al 45 y los resultados botaron algo impresionante.
El ADN de estos individuos mostró alteraciones específicas que no estaban presentes en aquellos sin antecedentes de trauma extremo, influyendo en su salud mental y predisponiéndolos a condiciones como el trastorno de estrés postraumático (TEPT).
“Es la primera evidencia en humanos que tiene una marca epigenética-(transmitir información biológica)-en la descendencia basada en la exposición de los padres, antes de la concepción”, afirma Rachel Yehuda, investigadora en el estudio.
Por otro lado,Hideko Tanamachi Tanaka de la UNAM, también confirmó este hecho, explicando que “los traumas pueden ser heredados por la madre desde el vientre y estar presentes antes de que la persona tenga memoria racional o consciente” ¿y cómo podemos darnos cuenta? cuando el bebé tiene un ‘sistema nervioso desregulado’ (llora mucho, no duerme, tiene reflujo, etc).
¿Hay manera de evitar los traumas?
Evitar los traumas es posible mediante diversas estrategias recomendadas por expertos. Algunas recomendaciones incluyen:
Practicar la resiliencia: desarrollar la capacidad de adaptarse y superar adversidades.
Buscar apoyo profesional: acudir a psicólogos especializados en traumas para recibir terapias adecuadas.
Realizar actividades de autocuidado: como ejercicio regular, meditación y mantener una dieta equilibrada.
Participar en grupos de apoyo: compartir experiencias y recibir consuelo de otros que han pasado por situaciones similares.
La prevención del trauma también puede beneficiarse de la educación emocional desde una edad temprana.
Recuerda que es esencial enseñar a los niños a expresar sus emociones y a manejar situaciones estresantes de manera saludable, así como también nosotros poder aprender a vivir con ellos de manera sana.
