¿Qué es la dieta flexitariana y cómo perder peso con ella?
Una propuesta para estar más saludable y empezar a comer mejor.19 de febrero, 2024 | 10:30 a.m.La dieta flexitariana es un plan de alimentación que combina elementos de la dieta vegetariana con la flexibilidad de incluir, en algunas ocasiones, carne y otros productos de origen animal.
Su nombre, “flexitariana”, proviene de la combinación de las palabras “flexible” y “vegetariano”. Esta dieta, que resulta muy útil para perder peso, se centra en la ingesta de vegetales y frutas, cereales y cualquier producto de origen vegetal, aunque intercala con productos cárnicos de tanto en tanto.
Ahora bien, a pesar de que esta dieta pueda ser buena para generar hábitos saludables y perder algunos kilos, hay que consultar con un experto antes de iniciarla. Los profesionales de la salud, como nutricionistas o dietistas, evalúan distintos factores como objetivos, salud, estilo de vida y demás.
No todas las dietas impactan de la misma manera en el cuerpo de las personas y se requiere, además, hacer un acompañamiento con ejercicio diario para poder adoptar mejores hábitos más allá de la alimentación.
Qué alimentos comer en la dieta flexitariana
La ventaja de este plan, tal y como se explicó anteriormente, es que permite incluir algunos alimentos cárnicos de tanto en tanto en las recetas. Su eje son los vegetales y las frutas, pero es posible incluir otros productos para obtener una alimentación completa, como los que aquí se destacan:
- Frutas y verduras: Consume una amplia variedad de frutas y verduras frescas para obtener vitaminas, minerales y antioxidantes.
- Legumbres: Frijoles, lentejas, garbanzos y otras legumbres son excelentes fuentes de proteínas vegetales y fibra.
- Granos enteros: Arroz integral, quinoa, avena, cebada y otros granos enteros también son buenas fuentes de energía y fibra.
- Frutos secos y semillas: Almendras, nueces y semillas de chía.
- Productos lácteos: Leche, yogur y queso, siempre que sean bajos en grasas.
- Pescado y mariscos: Se permite el consumo ocasional de pescado y mariscos, siempre que sean ricos en ácidos grasos omega-3.
- Carnes magras: Si decides incluir carne, elige opciones magras como pollo o pavo, limitando su frecuencia.
- Huevos: Son una fuente versátil de proteínas y nutrientes.
- Aceites saludables: Utiliza aceites como el aceite de oliva extra virgen para cocinar y aderezar.