¿Te enfermaste del estómago? Esta es la dieta que debes seguir

El malestar estomacal es una experiencia que todos hemos experimentado en algún momento. Ya sea debido a una infección viral, intoxicación alimentaria o simplemente a una digestión difícil, los problemas estomacales pueden afectar significativamente nuestra calidad de vida.

Aquí te presentamos una guía práctica sobre la dieta que debes seguir si te has enfermado del estómago.

La dieta es el primer paso para superar el dolor de estómago

1. Hidratación:

Uno de los aspectos más importantes cuando te sientes mal del estómago es mantener una buena hidratación. La pérdida de líquidos debido a vómitos o diarrea puede llevar a la deshidratación, lo cual debe evitarse a toda costa. Opta por agua, caldos ligeros y bebidas isotónicas para reponer los electrolitos perdidos. Evita las bebidas con cafeína y las muy azucaradas, ya que pueden irritar aún más el estómago.

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2. Alimentos blandos:

Cuando el estómago está irritado, es crucial optar por alimentos blandos y fáciles de digerir. Algunas opciones recomendadas incluyen arroz hervido, puré de papas, plátanos, manzanas cocidas y galletas saladas. Estos alimentos proporcionan nutrientes esenciales sin añadir estrés adicional al sistema digestivo.

3. Evita lácteos y alimentos grasos:

Los productos lácteos y los alimentos grasos pueden empeorar los problemas estomacales, ya que son más difíciles de digerir. Evita la leche, el queso y los alimentos fritos hasta que tu estómago se recupere por completo. Opta por alternativas más ligeras y de fácil digestión.

4. Proteínas magras:

Las proteínas magras, como el pollo hervido o a la plancha, el pescado y los huevos cocidos, son opciones excelentes para mantener un nivel adecuado de proteínas sin sobrecargar el sistema digestivo. Evita las carnes grasas y los embutidos, ya que pueden resultar difíciles de digerir.

5. Pequeñas porciones y comidas frecuentes:

En lugar de ingerir grandes cantidades de alimentos en una sola comida, opta por porciones más pequeñas pero más frecuentes a lo largo del día. Esto aliviará la carga sobre tu estómago y facilitará la digestión.

6. Infusiones de hierbas:

Las infusiones de hierbas, como la manzanilla o el jengibre, pueden ayudar a calmar el estómago y aliviar las náuseas. Estas bebidas no solo son reconfortantes, sino que también ofrecen propiedades antiinflamatorias que pueden ser beneficiosas durante la recuperación.

7. Evita irritantes:

Aléjate de alimentos y bebidas que puedan irritar el estómago, como el café, los alimentos picantes, el chocolate y los cítricos. Estos pueden agravar la irritación y prolongar el tiempo de recuperación.

Recuerda que cada persona es diferente, y lo que funciona para una persona puede no ser igualmente efectivo para otra.

Esta guía proporciona pautas generales, pero un profesional de la salud puede ofrecer recomendaciones personalizadas basadas en tu situación específica. La clave es escuchar a tu cuerpo, descansar lo suficiente y darle tiempo para sanar mientras sigues una dieta suave y fácil de digerir.