¿Alguna vez has visto en las películas y series una manzana en el escritorio de los maestros? Regularmente eran regalos hacia los docentes por parte de sus alumnos, pero esta bonita tradición tiene un origen muy peculiar y aquí te lo contamos.
Esta es la increíble razón por la que es común regalar manzanas a los maestros
La tradición de regalar manzanas a los maestros tiene varias explicaciones, tanto históricas como simbólicas.
Principalmente se le da un reconocimiento nutrimental al maestro: Las manzanas son vistas como un símbolo de conocimiento y salud. En la mitología y la literatura, las manzanas a menudo representan sabiduría y aprendizaje. Por ejemplo, en la mitología griega, las manzanas de las Hespérides eran consideradas un símbolo de conocimiento.
De esta manera, regalar una manzana a un maestro puede simbolizar el reconocimiento de su rol en la impartición de conocimiento y el deseo de que se mantengan saludables.
En la antigüedad era visto de una manera distinta. Durante el siglo XIX y principios del XX, en muchas áreas rurales de Estados Unidos y Europa, los salarios de los maestros eran muy bajos.
Las comunidades a menudo compensaban esto proporcionando alimentos a los maestros. Las manzanas, que eran fáciles de almacenar y transportar, se convertían en una forma práctica y accesible de apoyo.
Las manzanas son un regalo tradicional a los maestro | Descubre aquí por qué se les regala esta fruta a los docentes (Freepik)
La manzana como obsequio tiene un sentido religioso también. En muchas regiones, las manzanas eran una fruta común y abundante, especialmente en las zonas rurales.
Dado que muchas familias vivían de la agricultura, era fácil para los estudiantes traer manzanas de sus propios huertos como un regalo apreciado y sencillo para sus maestros.
También podría ser símbolo del vínculo dentro del salón. La tradición de regalar manzanas a los maestros también puede estar relacionada con el deseo de fomentar una conexión positiva entre estudiantes y maestros.
Un pequeño regalo como una manzana podría haber servido para construir una relación más cercana y respetuosa, promoviendo un ambiente de aprendizaje más armonioso.
La tradición de regalar manzanas a los maestros tiene raíces en la historia y la cultura, vinculadas tanto a la simbología del conocimiento y la salud como a prácticas económicas y sociales de apoyo en las comunidades rurales.
