Los tamales son uno de los platillos favoritos de todos los mexicanos, principalmente cuando se trata de buscar un rico desayuno. Sin embargo, tienen su grado de dificultad y si no quieres complicarte la vida, compartimos contigo tres lugares donde venden los mejores tamales de la Ciudad de México (CDMX).
Estas son las tamalerías que puedes visitar en la capital
Tamales Doña Vero: estos son uno de los más populares de la CDMX, se trata de un menú de tamales dulces, vegetarianos y el valor agregado ‘extravagantes’, estos últimos encontrarás de chapulines, pastor, cochinita pibil y hasta de pollo con mole negro oaxaqueño.
Si quieres los puedes pedir para llevar o comer en el restaurante que está ubicado en la avenida Monterrey número 313 en la colonia Roma Sur, alcaldía Cuauhtémoc en un horario de lunes a jueves de 10:00 a 23:00 horas, viernes y sábados de 10:00 a 00:00 horas con precios desde los 49 pesos la pieza.
Tamalería Nativitas: Ubicado en la calle Don Luis número 24 en la colonia del mismo nombre del local en la alcaldía Benito Juárez, esta tamalería tiene vendiendo desde 1999 con los clásicos de dulce y salados gourmets típicos de otros estados.
Por ejemplo, puedes pedir uno de dulce, cajeta o zarzamora con queso. Si lo tuyo es lo salado entonces pídete uno de mole, salsa verde o de frijol con queso, aunque no deberías dejar pasar la oportunidad de probar los yucatecos, pipián rojo, cambray, chipilín o de flor de calabaza. Los precios son a partir de los 30 pesos por pieza.
Esta es la mejor opción de tamales cerca del Aeropuerto de la CDMX
Tamalitos de la Balbuena: esta es una opción que no va a fallar. Se trata de un lugar imperdible donde probarás tamales tradicionales y también típicos de Puebla y Chiapas.
Pero los que se sacan un 10 son los tamales dulces porque tienen los clásicos de piña o pasas, aunque la versión de Gansito, Carlos V y Galletas Oreo son un verdadero manjar. La tamalería está ubicada en Fray Servando Teresa de Mier número 8 en la colonia Jardín Valbuena.
Antes de irte a la chamba, deberías pasarte a una de estas tamalerías y echarte uno para recargar la pila y comenzar con toda tu jornada laboral o por qué no una guajolota, uno de los placeres culinarios por excelencia en la capital chilanga.
