¿Cómo hacer tu conserva de jitomate para que no te salga después carísimo?

El jitomate es un ingrediente básico en muchas cocinas, y tener una conserva casera a mano te permitirá preparar salsas, sopas, guisos y más con facilidad. Te decimos los pasos para hacer tu propio producto de manera económica y efectiva, asegurando que disfrutes de su delicioso sabor y versatilidad sin gastar de más.

Así puedes hacer tu conserva de jitomate en casa

Para hacer conserva de calidad, es importante seleccionar jitomates maduros y frescos. Puedes optar por variedades como roma o saladette, que son carnosos y tienen menos contenido de agua, lo que los hace ideales para la conserva. Trata de conseguir jitomates en su punto óptimo de madurez, sin manchas ni magulladuras.

Una vez tus jitomates listos, entonces toma nota porque te decimos cómo hacer tu conserva en casa:

• Lava bien los jitomates para eliminar cualquier suciedad. Luego, retira los tallos y corta los jitomates en cuartos o mitades, según tu preferencia. Si lo deseas, también puedes pelar los jitomates escaldándolos brevemente en agua hirviendo y luego sumergiéndolos en agua fría para facilitar el proceso.
• Colócalos cortados en una olla grande y cocina a fuego medio-alto hasta que comiencen a ablandarse y suelten sus jugos. Esto puede tomar alrededor de 15-20 minutos. Revuelve ocasionalmente para evitar que se peguen en el fondo de la olla.
• Una vez estén bien cocidos y suaves, puedes pasarlos por un pasapurés, una licuadora o usar una batidora de mano para obtener una mezcla suave y homogénea. Asegúrate de eliminar cualquier piel o semilla que pueda quedar.
• Regresa la mezcla de jitomate triturado a la olla y cocina a fuego medio-bajo hasta que la salsa se reduzca y espese a la consistencia deseada. Este paso puede tardar varias horas, dependiendo de la cantidad de salsa y la consistencia deseada. Revuelve regularmente para evitar que se pegue.
• Una vez que haya alcanzado la consistencia deseada, sazónala con sal y otros condimentos al gusto, como ajo en polvo, cebolla en polvo, orégano o chile en polvo, según tus preferencias.
• Lava bien frascos de vidrio con tapa y esterilízalos sumergiéndolos en agua hirviendo durante unos minutos. Llena los frascos con la salsa de jitomate caliente, dejando un espacio libre en la parte superior. Asegúrate de sellar bien los frascos.

Proceso de conservación

Para conservar la salsa de jitomate de manera segura, puedes optar por dos métodos:

1. Proceso de agua caliente: Coloca los frascos llenos en una olla grande con agua caliente que cubra los frascos por completo. Lleva el agua a ebullición y procesa durante al menos 40 minutos. Retira con cuidado y deja enfriar completamente antes de almacenar.
2. Almacenamiento en el congelador: Si prefieres no usar el método de procesamiento en caliente, puedes simplemente dejar que la salsa de jitomate se enfríe por completo y luego congelarla en bolsas o recipientes aptos para congelador.

Al hacer tu propia conserva de jitomate, puedes disfrutar de la frescura y el sabor de esta fruta durante todo el año, sin preocuparte por los altos precios de las conservas comerciales. Además, controlas los ingredientes y los condimentos, creando una salsa personalizada según tus gustos.