Platillo delicioso si los hay, las albóndigas son una receta única y deliciosa para cualquier momento del año. Es fácil dominar esta preparación y puedes repetirla cuantas veces quieras sin miedo a aburrirte. Lo mejor de todo es que se llevan bien con un puré, pasta, en caldo o solas con un poco de ensalada.
Una cosa importante antes de comenzar a cocinar es que la clave está en la carne que elijas. Se preparan con carne molida, la cual puede ser una combinación de varios cortes molidos juntos. Tú decides qué sabor quieres darle dependiendo de lo que busques.
A continuación, una receta que funciona a modo de guía. Una vez que domines este platillo, puedes reversionarlo para convertirlo en lo que tú quieras.
Albóndigas | Aprende a prepararlas con esta receta
(Fuente: Pexels)
Cómo preparar albóndigas
En lo que refiere a las albóndigas, busca un recipiente y mezcla la carne molida, los huevos y un poco de yerbabuena desmenuzada.
Pon sal y pimienta y mezcla con las manos hasta que se incorporen bien. Puedes agregar pan molido para darle consistencia a las albóndigas o un poco de arroz blanco y escurrido previamente hervido (no más de 15gr).
Deja reposar por unos minutos y empieza a hacer bolitas del tamaño de la palma de tu mano. Colócalas en otro recipiente y reserva.
Mientras, corta los jitomates y la cebolla y mézclalos con los dientes de ajo enteros y un poco de agua en una licuadora. Licúa.
En una cazuela, calienta aceite de oliva y sofríe la salsa de jitomate por 5 minutos. Agrega unos 800ml de agua, para que se forme un caldo, y condimenta con sal y pimienta a gusto.
Una vez que hierva, agrega las albóndigas una a una. No las mezcles y espera a que se cocinen para revolver la preparación ya que correrías el riesgo de que se deshagan. Intenta que no queden una pegada a la otra para que no se forme una masa gigante.
