¿Cada cuándo debe bañarse una persona?
El baño es una parte esencial de la rutina de cuidado personal, pero la frecuencia con la que una persona debe bañarse depende de varios factores.
Que si diario, que un día si y uno no o que si cada semana... cada persona te dirá una respuesta diferente a la pregunta de cada cuándo te debes de bañar, pero ¿qué dicen los expertos?
Y es que recientemente surgió la polémica en La Casa de los Famosos sobre que cada vez es más común que Briggitte no se bañe o eso dicen los habitantes y que según no soportan su olor dentro.
¿Cada cuándo me debo bañar?
Existen muchos mitos y debates sobre la frecuencia ideal para bañarse. Algunas personas creen que es necesario bañarse todos los días para mantener la higiene, mientras que otras consideran que esto podría ser perjudicial para la piel.
Pero para determinar cada cuándo te debes de bañar se deben considerar varios factores que van desde el clima hasta la actividad física que cada persona realiza.
El académico Ariel Vilchis Reyes, del Departamento de Salud Pública de la Facultad de Medicina de la UNAM, señala tres factores esenciales para definir cada cuánto tiempo debemos bañarnos: el clima, la condición biológica y la actividad física.
- Clima y temperatura
El primer factor a considerar es el clima, pues en zonas donde las temperaturas son frías, bañarse dos o tres veces por semana puede ser suficiente para mantener una buena higiene sin comprometer la salud de la piel. En climas cálidos, donde la sudoración es más intensa, puede ser necesario bañarse hasta dos veces al día.
El exceso de baño en climas fríos puede deshidratar la piel, mientras que en ambientes cálidos es imprescindible eliminar el sudor y las bacterias que se acumulan en la superficie del cuerpo. De acuerdo con Vilchis Reyes, “si estamos en un clima frío, lo mejor es bañarse dos o tres veces por semana, pero si estamos en un clima cálido y sudamos mucho, se recomienda bañarse hasta dos veces al día”.
- Condición biológica
Cada cuerpo es distinto, lo que significa que algunas personas sudan más que otras o producen más grasa en la piel. La capa lipídica que se forma en la superficie de la piel actúa como una barrera protectora contra agentes externos. Sin embargo, si se elimina esa capa con baños demasiado frecuentes, pueden surgir problemas dermatológicos.
Si bien el baño diario puede parecer saludable, hay que tener precaución. Las personas con pieles más sensibles podrían experimentar dermatitis, celulitis u otras infecciones dermatológicas debido a la pérdida de la barrera natural de la piel.
- Actividad física y trabajos que requieren esfuerzo
Las personas que realizan actividades físicas intensas o trabajos que implican esfuerzo físico, como los albañiles o recolectores de basura, suelen sudar más y acumular bacterias en su piel. En estos casos, la recomendación es bañarse dos veces al día para eliminar las bacterias generadas por la sudoración.
De acuerdo con Vilchis Reyes, la actividad física es uno de los principales factores que determinan la frecuencia del baño, ya que el sudor, junto con la suciedad y el polvo, puede provocar infecciones en la piel si no se elimina adecuadamente.
En tanto, la Organización Mundial de la Salud (OMS) sugiere que lo más recomendable es bañarse cada tercer día, manteniendo una buena higiene en áreas específicas como las axilas, ingles y pies, donde se concentra la mayor sudoración. La OMS enfatiza la importancia de la higiene diaria en estas zonas, aunque no sea necesario un baño completo todos los días.
Bañarse cada tercer día permite que la piel mantenga su barrera protectora natural sin exponerla a un exceso de agua y productos que puedan dañar su equilibrio, señala. Además, se reduce el riesgo de desarrollar problemas como la dermatitis o la resequedad.
Beneficios de bañarse
Bañarse ofrece numerosos beneficios tanto para la salud física como mental. Algunos de ellos incluyen:
- Mejora la circulación: El agua caliente ayuda a dilatar los vasos sanguíneos, mejorando la circulación y favoreciendo la oxigenación de los tejidos.
- Relajación muscular: Un baño caliente alivia la tensión muscular y reduce dolores corporales, especialmente después de una jornada intensa.
- Promueve el bienestar mental: Bañarse ayuda a reducir el estrés y la ansiedad, gracias a su efecto calmante, además de mejorar el estado de ánimo.
- Limpieza y cuidado de la piel: Ayuda a eliminar impurezas y bacterias de la piel, previniendo problemas como el acné y contribuyendo a una mejor salud cutánea.
¿Es malo bañarse todos los días?
El baño diario es una práctica común para muchas personas, pero ¿es realmente necesario?
Desventajas de bañarse todos los días
- Resequedad en la piel: El agua caliente y los jabones fuertes pueden eliminar los aceites naturales de la piel, causando sequedad.
- Irritación: Las personas con piel sensible pueden experimentar enrojecimiento o irritación si se bañan demasiado frecuentemente.
- Desbalance del microbioma: La piel alberga bacterias beneficiosas que protegen contra infecciones. Bañarse en exceso puede alterar este equilibrio natural.
Recomendaciones a la hora del baño
Independientemente de cuántas veces te bañes, es importante seguir algunas recomendaciones para proteger la piel y aprovechar al máximo los beneficios del baño.
- Temperatura del agua
Es preferible utilizar agua tibia en lugar de agua caliente, ya que el agua caliente puede resecar la piel y eliminar los aceites naturales que la protegen. Mantener la temperatura en un nivel moderado ayudará a prevenir problemas de piel seca.
- Jabones
El tipo de jabón que utilices al bañarte es crucial. Opta por jabones suaves que respeten el pH de la piel y evita aquellos que contienen fragancias fuertes o productos químicos que puedan irritar. Los jabones hidratantes o con ingredientes naturales, como el aloe vera, son ideales para mantener la piel en buen estado.
- Duración del baño
Evita pasar demasiado tiempo en la ducha. Bañarse por más de 15 minutos, especialmente con agua caliente, puede aumentar la resequedad en la piel. Una ducha rápida de 5 a 10 minutos es suficiente para limpiar el cuerpo sin causar daño a la piel.
- Hidratación
Después de bañarse, es esencial aplicar una crema hidratante o aceite corporal. Esto ayuda a sellar la humedad en la piel y prevenir la resequedad, especialmente si vives en un clima frío o seco
Entonces, la frecuencia del baño depende de varios factores, no existe una única respuesta correcta sobre cuántas veces debemos bañarnos, ya que cada persona es diferente. Tanto el exceso como la falta de baños pueden tener consecuencias negativas para la salud de la piel y el cabello.