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¿Pan de dulce para el frío? Esta cantidad puedes comer para no engordar, según Harvard
El café con pan es un gran compañero del clima frío, y te va a gustar más cuando sepas que es posible disfrutarlo sin engordar.07 de julio, 2024 | 11:00 a.m.
Pan dulce | Descubre cómo comerlo para que no afecte tu salud (Pexels).
Cuando la temperatura baja, es normal que se te antoje un café caliente con un pan, es la combinación perfecta para disfrutar un día lluvioso, pero viene acompañado de cierta preocupación por romper la dieta, pero gracias a Harvard, conoceremos la cantidad de pan dulce que puedes consumir sin afectar tu salud, y para que deleites a tu estómago sin culpa.
Comer pan dulce sin afectar tu salud es posible según Harvard
El pan dulce se ha convertido en un básico de la temporada de frío, acompañado, por supuesto, de un café o chocolate caliente, que fusione los sabores de ambos con un clima lluvioso o fresco.
El único inconveniente de esto es que podría hacerte engordar o afectar tu salud, y a nadie le gusta eso. Pues al comerlo, conociendo las consecuencias, no se disfruta de la misma forma este delicioso postre.
Afortunadamente, Harvard a través de su sitio Harvard Health le ha dado una esperanza a los amantes del pan dulce, pues argumentan que existe una forma de consumir este delicioso postre sin afectar tu salud.
Podrás darte un gustito una vez por semana, ya que, Harvard recomienda que el pan dulce debe consumirse una vez cada siete días, y de esta forma no estaría dañando tu salud.
Pues debido a los ingredientes en el pan dulce, como su alta cantidad de azúcar, mantequilla y aceite, tu salud se podría ver afectada, pues no son ingredientes saludables para su consumo.
Mayo Clinic recomienda directamente en su sitio, que el pan dulce no sustituya ninguna comida, pues es necesario mantener un balance para que el consumo de este delicioso postre no sea un problema en tu salud.
Así que, si las lluvias llegan y el clima se enfría, puedes estar seguro de que comer pan y café es muy aceptable siempre y cuando no lo hagas a diario. Date un gustito de vez en cuando: no sólo mantendrás tu estómago calientito, sino que te pondrá de buen humor disfrutar algo tan sabroso ad hoc con el clima.
