¿Por qué NO dormir nos sube de peso?

El sueño es un componente fundamental para la salud y el bienestar general. No dormir lo suficiente no solo afecta nuestro estado de ánimo y nuestra capacidad de concentración, sino que también puede tener un impacto significativo en nuestro peso corporal.

Así impactas a tu cuerpo negativamente por no dormir

Dormir lo suficiente es crucial para el buen funcionamiento del metabolismo. Durante el sueño, el cuerpo lleva a cabo varias funciones importantes, como la reparación de tejidos, el fortalecimiento del sistema inmunológico y la regulación de las hormonas que controlan el hambre y el apetito.

La hormona leptina, que suprime el apetito, y la hormona grelina, que lo estimula, se ven particularmente afectadas por la falta de sueño. Cuando no dormimos lo suficiente, los niveles de leptina disminuyen y los niveles de grelina aumentan, lo que nos hace sentir más hambre y nos lleva a comer en exceso.

La privación del sueño también afecta otras hormonas importantes para el control del peso, como la insulina, que es responsable de regular los niveles de azúcar en la sangre y de almacenar grasa en el cuerpo. La falta de sueño puede provocar resistencia a la insulina, lo que significa que el cuerpo no utiliza la insulina de manera eficiente.

Esto no solo aumenta el riesgo de desarrollar diabetes tipo 2, sino que también puede llevar al aumento de peso, ya que el exceso de azúcar en la sangre se convierte en grasa almacenada.

También es más probable que hagamos elecciones alimentarias poco saludables. La falta de sueño afecta la corteza prefrontal del cerebro, que es responsable del control de impulsos y la toma de decisiones. Esto puede llevar a antojos de alimentos ricos en calorías, azúcares y grasas, ya que el cerebro busca fuentes rápidas de energía para compensar la falta de descanso.

Por otro lado, cuando estamos cansados, es menos probable que participemos en actividades físicas, lo que reduce nuestro gasto energético total y favorece el aumento de peso. Además, la falta de sueño puede afectar el rendimiento durante el ejercicio, haciendo que los entrenamientos sean menos efectivos.

Consejos para mejorar el sueño y controlar el peso

1. Establecer un horario de sueño regular: Irse a la cama y despertarse a la misma hora todos los días, incluso los fines de semana, ayuda a regular el reloj interno del cuerpo.

2. Crear una rutina relajante antes de dormir: Actividades como leer un libro, tomar un baño caliente o practicar la meditación pueden ayudar a preparar el cuerpo y la mente para el sueño.

3. Evitar la cafeína y el alcohol: Estos pueden interferir con la capacidad de conciliar el sueño y la calidad del mismo.

4. Hacer ejercicio regularmente: La actividad física puede mejorar la calidad del sueño, pero es mejor evitar ejercicios intensos justo antes de acostarse.

5. Limitar el uso de dispositivos electrónicos: La luz azul emitida por teléfonos, tabletas y computadoras puede interferir con la producción de melatonina, una hormona que regula el sueño.

6. Mantener un ambiente de sueño adecuado: Un dormitorio oscuro, tranquilo y fresco puede promover un sueño reparador.

La falta de sueño es un factor importante que contribuye al aumento de peso. Afecta la regulación hormonal, el comportamiento alimentario, la actividad física y los niveles de estrés, todos los cuales son cruciales para mantener un peso saludable.

Adoptar buenos hábitos de sueño no solo mejorará la calidad de vida en general, sino que también puede ser una herramienta efectiva en la prevención del aumento de peso y la promoción de la salud metabólica.