¿Cómo beber cerveza sin que te inflame ni subas de peso?

¿A quién no le laten las ‘cheves’? El exceso de esta bebida famosa mundialmente puede tener efectos negativos como la inflamación y el aumento de peso. Afortunadamente, existen algunos tips que puedes hacer para disfrutar de una cervecita o más de manera más saludable y evitar estos problemas.

Conoce los efectos de la cerveza en el cuerpo

La cerveza, en particular, contiene dióxido de carbono (CO2) como subproducto de la fermentación. Una lata de esta bebida puede tener 2.5 volúmenes de este gas, que contribuye a la formación de flatulencias y eructos, según datos del Instituto Nacional sobre Abuso de Alcohol y Alcoholismo (NIAAA) de Estados Unidos,

¿Cómo reducir la inflamación?

Para reducir la inflamación causada por el consumo de cerveza, es importante considerar la forma en que se sirve y se consume. Expertos sugieren tomarla en un vaso en lugar de beber directamente de la lata o botella. Al verterla en un vaso, el gas atrapado se libera antes de llegar al estómago, reduciendo la sensación de hinchazón y malestar estomacal.

Además la manera en que se sirve también influye, por lo que si lo haces en un ángulo de 45 grados ayudas también a la formación de burbujas o espuma, que liberan el gas en cada trago.

Así puedes controlar tu peso al beber cerveza

El consumo excesivo de cerveza también puede contribuir al aumento de peso debido a su contenido calórico y a su capacidad para estimular el apetito. Sin embargo, existen estrategias para disfrutar de la cerveza sin comprometer los esfuerzos por mantener un peso saludable:

• Moderación y elección de opciones más ligeras: Es importante consumirla con moderación y no exceder las recomendaciones de consumo saludable. Además, optar por cervezas con un contenido alcohólico más bajo o por variedades light o artesanales que pueden reducir la cantidad de calorías consumidas por porción.
• Compensar las calorías: Si se sabe que se va a disfrutar de una cerveza, se puede ajustar la ingesta calórica de otras comidas o bebidas durante el día para compensar el exceso de calorías. Por ejemplo, reducir la porción de carbohidratos en una comida o elegir opciones más saludables para acompañar la cerveza, como verduras crudas o proteínas magras.

Disfrutar de una cerveza sin sufrir los efectos secundarios de la inflamación y el aumento de peso requiere cierta atención a la forma en que se consume esta bebida. Además, es importante consumir cerveza con moderación y acompañarlas de una forma de vida más saludable.