Realizarse procedimientos médicos o estéticos es una tarea que debe realizarse por un profesional de la salud especializado en la rama, pues de no ser un establecimiento certificado podría ocasionar diferentes padecimientos no deseados, tal como los faciales vampiro, un procedimiento para el cuidado de la piel que recientemente causó una gran polémica debido a un contagio que ocurrió en una clínica, y aquí te decimos cómo prevenirlo.
Toma estas precauciones para evitar un contagio de VIH en un facial vampiro
Los faciales vampiro, también conocidos como “terapia de rejuvenecimiento con PRP” o “faciales de plasma rico en plaquetas”, son un tratamiento de belleza que ha ganado popularidad en los últimos años.
Este procedimiento implica extraer una pequeña cantidad de sangre del paciente, similar a lo que se hace en un análisis de laboratorio estándar.
Luego, esa sangre se centrifuga para separar el plasma rico en plaquetas (PRP), que es una parte de la sangre con altas concentraciones de factores de crecimiento.
Es un procedimiento que debe ser realizado por un profesional de la salud en una clínica certificada. Sigue estos consejos para que te asegures de que le confías tu rostro a la persona indicada:
Busca un médico o un centro de estética con una buena reputación y experiencia en este tipo de procedimientos. Asegúrate de que estén utilizando equipos esterilizados y sigan todas las medidas de higiene y seguridad.
Antes de someterte al tratamiento, observa el entorno y asegúrate de que esté limpio y ordenado. Los utensilios y equipos utilizados deben estar esterilizados y desechables cuando sea posible.
Asegúrate de que el plasma rico en plaquetas utilizado en el tratamiento sea extraído de tu propia sangre y no provenga de otras fuentes. Esto minimiza cualquier riesgo de infección.
Habla con el proveedor sobre las medidas de seguridad que implementan para prevenir la contaminación cruzada y la transmisión de enfermedades infecciosas, incluido el VIH. Deben seguir protocolos estrictos para proteger la salud de los pacientes.
Antes de someterte al tratamiento, solicita información detallada sobre el procedimiento, los posibles riesgos y los cuidados posteriores. Si tienes alguna preocupación o pregunta, no dudes en expresarlas al proveedor de atención médica.
