¿Qué tan cierto es que los corajes ponen los ojos amarillos? Aquí te lo decimos
Seguramente tu abuelita o tu mamá te han dicho que ya tienes los ojos amarillos por andar haciendo corajes y aquí, te decimos si esa creencia es verdad o mito.28 de abril, 2024 | 07:00 a.m.El folklore humano está lleno de creencias y dichos populares que han pasado de generación en generación, muchas de las cuales han sido aceptadas sin cuestionamiento. Una de estas afirmaciones es la idea de que los corajes pueden hacer que los ojos se vuelvan amarillos.
Pero, ¿hay alguna verdad detrás de esta afirmación o es simplemente un mito arraigado en la cultura popular? En esta nota, exploraremos la ciencia detrás de esta creencia y analizaremos si realmente existe alguna conexión entre ambos puntos.
Así surgió la creencia de los ojos amarillos por enojo
Se dice que cuando una persona experimenta una fuerte emoción, como el enojo o la ira, su cuerpo libera ciertas sustancias químicas que pueden tener efectos físicos, incluido el cambio en el color de los ojos. Esta creencia ha sido transmitida de generación en generación, convirtiéndose en parte de la sabiduría popular en algunas comunidades.
La realidad científica
Sin embargo, desde el punto de vista científico, no hay evidencia que respalde la idea de que los corajes puedan cambiar el color de los ojos de una persona. Lo que sí puede cambiártelos es una fuerte infección estomacal, hepatitis o el consumo excesivo de cafeína.
El enojo o la ira pueden provocar cambios fisiológicos en el cuerpo, como un aumento en la frecuencia cardíaca, la presión arterial y la liberación de hormonas del estrés como el cortisol y la adrenalina.
¿De dónde viene la asociación con el color amarillo?
La asociación entre los corajes y el color amarillo en los ojos puede deberse a una confusión con otra condición médica: la ictericia. La ictericia es un trastorno que causa la coloración amarillenta de la piel y los ojos debido a un exceso de bilirrubina en el cuerpo.
Esta bilirrubina puede acumularse en los tejidos cuando el hígado no puede procesarla adecuadamente, y puede ser causada por varias condiciones médicas.
La idea de que los corajes pueden hacer que los ojos se vuelvan amarillos es más un mito que una realidad científica. Si bien el enojo y la ira pueden tener efectos físicos y emocionales en el cuerpo, no hay evidencia que sugiera que puedan cambiar el color de los ojos de una persona.