¿Qué pasa si me paso mi comida del día?

Cuando nos encontramos en situaciones donde, por diversas razones, nos vemos obligados a pasar largos periodos sin comer, nuestro cuerpo puede experimentar una serie de efectos tanto a corto como a largo plazo.

Esto es lo que le pasa a tu cuerpo si NO comes correctamente

La ausencia de alimentos durante un período prolongado puede afectar negativamente nuestro estado de salud física y mental, así como nuestro rendimiento y bienestar general. A continuación, te decimos los posibles efectos de saltarse una comida y cómo podemos mitigar estos impactos.

Efectos a corto plazo

1. Fatiga y falta de energía: La comida es la principal fuente de energía para nuestro cuerpo. Al pasar largos periodos sin comer, podemos experimentar fatiga y falta de energía, lo que dificulta nuestra capacidad para concentrarnos y realizar tareas cotidianas.

2. Irritabilidad y cambios de humor: El hambre puede afectar nuestro estado de ánimo y provocar irritabilidad, ansiedad y cambios de humor. Esto puede influir en nuestras interacciones sociales y nuestro bienestar emocional.

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3. Baja concentración y rendimiento cognitivo: La falta de nutrientes puede afectar la función cognitiva y la capacidad de concentración, lo que puede dificultar el desempeño en el trabajo, en los estudios y en otras actividades que requieren atención y enfoque.

4. Hipoglucemia: Saltarse una comida puede provocar una disminución en los niveles de azúcar en sangre, lo que puede causar síntomas como mareos, sudoración, temblores y debilidad.

5. Desórdenes alimenticios: Saltarse comidas de manera regular puede desencadenar desórdenes alimenticios como la bulimia o la anorexia nerviosa, ya que puede alterar nuestra relación con la comida y llevarnos a desarrollar patrones poco saludables de alimentación.

Efectos a largo plazo

• Desequilibrios nutricionales: La falta de una alimentación adecuada puede provocar deficiencias nutricionales a largo plazo, lo que aumenta el riesgo de desarrollar problemas de salud como osteoporosis, anemia, y trastornos cardiovasculares.
• Aumento de peso: Aunque pueda parecer contradictorio, saltarse comidas puede contribuir al aumento de peso a largo plazo. Esto se debe a que el hambre puede provocar episodios de sobreingesta cuando finalmente comemos, así como alteraciones en el metabolismo que pueden dificultar la pérdida de peso.
• Impacto en el metabolismo: La falta de alimentación regular puede ralentizar el metabolismo y dificultar la capacidad del cuerpo para quemar calorías de manera eficiente, lo que puede contribuir al aumento de peso y a la acumulación de grasa corporal.
• Mayor riesgo de enfermedades crónicas: La falta de una alimentación adecuada y regular puede aumentar el riesgo de desarrollar enfermedades crónicas como la diabetes tipo 2, la hipertensión arterial y las enfermedades cardiovasculares.

Saltarse una comida puede tener una serie de efectos negativos tanto a corto como a largo plazo en nuestra salud física y mental. Es importante priorizar una alimentación balanceada y regular, incluso en situaciones donde el tiempo y las circunstancias pueden dificultar el acceso a la comida.

Planificar comidas equilibradas y llevar refrigerios saludables puede ayudar a prevenir los efectos negativos de saltarse comidas y mantener un estilo de vida saludable a largo plazo.