4 consejos para que tu licuadora dure muchos años y no se rompa

Una licuadora es quizás uno de los electrodomésticos más queridos de la cocina. En primer lugar, es un elemento de fácil uso y que rápidamente resuelve los problemas a la hora de hacer un jugo o licuado. Además, por el otro, es posible utilizarla en preparaciones saladas para hacer salsas.

Por eso hay que cuidarla. Es muy fácil de romper y no es un producto barato, motivo por el cual es conveniente tener en cuenta estos consejos para alargar su vida útil.

Cuatro consejos para que la licuadora no se rompa

• No laves el motor con agua

Expertos en electrónica recomiendan limpiar el motor de vez en cuando para que no se acumule polvo que, con el tiempo, pueda dañarlo. Sin embargo, un error es mojarlo dado que puede generar un cortocircuito y romperlo definitivamente. La clave es limpiarlo en seco.

• No dejarla conectada

Esto aplica para cualquier electrodoméstico de la casa. Dejar conectado uno de estos productos hace que estén continuamente recibiendo energía, pudiendo eventualmente quemar el motor. Además, si cerca de la superficie donde está conectada puede haber agua, el resultado sería desastroso.

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• No sobrecargar el vaso

Un error común es creer que se puede poner una cantidad infinita de ingredientes en el vaso de la licuadora y ese es un problema grave. Si hay una enorme cantidad de cosas, el motor debe hacer un esfuerzo extra para poder licuar todo y ese desgaste se paga con menos vida útil del electrodoméstico. Lo mejor es atenerse a los limitantes que indica el fabricante.

• No intentes procesar alimentos muy duros

Ocurre lo mismo que en el caso antes mencionado. Si el alimento es demasiado duro, el motor deberá hacer un mayor esfuerzo durante más tiempo para procesarlo como corresponde. Eso puede provocar un sobrecalentamiento y su pronta falla, algo que buscamos evitar.